LA LONJA DE LA SEDA

La Lonja de la Seda de Valencia o Lonja de los Mercaderes (en valenciano Llotja de la Seda o Llotja de Mercaders) es una obra maestra del gótico civil valenciano situada en el centro histórico de la ciudad de Valencia (España). Declarada, en 1996, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, se encuentra situada en la plaza del Mercado, número 31, frente a la Iglesia de los Santos Juanes y del Mercado Central de Valencia.

Francesc Baldomar fue el autor del proyecto original de la Lonja de Valencia, ​ lo comenzó a elaborar entre los años 1470-1471. Sus discípulos Joan Ivarra y Pere Compte recibieron en 1481, cinco años después de su muerte (1476), el encargo de terminar de construirla según los magníficos planos originales que había dibujado en sus últimos años de vida. Los documentos apuntaban a un plano de igualdad entre ambos: "que un mestre no sia subordinat al altre nil altre al altre", es decir, que ninguno fuera más importante que el otro, así como también que la Lonja se debía hacer: "qual es feta en mostra molt ben divuissada o en altra manera segons millor", es decir, como en un plano muy bien dibujado que existía o de otra forma mejor. Su planteamiento siguió el modelo de la Lonja de Palma de Mallorca, constituyéndose en un edificio emblemático de la riqueza del Siglo de Oro valenciano (siglo xv) y muestra de la revolución comercial durante la Baja Edad Media, del desarrollo social y del prestigio conseguido por la burguesía valenciana.

La construcción de la Lonja, se ha interpretado como el resultado de la prosperidad comercial conseguida por Valencia en el siglo xv, y como un símbolo del poder de la ciudad para atraer a los comerciantes, en un momento en que ya se vislumbraban tiempos difíciles para la economía local derivados del descubrimiento de América y el consiguiente desplazamiento del comercio del Mediterráneo hacia el Atlántico.

Las lonjas de comercio en la Corona de Aragón se construían siguiendo el mismo esquema: una sala de planta rectangular sostenida por columnas. La de Valencia fue precedida por la Lonja de Barcelona (1380-1392) y la Lonja de Palma (1420-1448), con unos pilares helicoidales donde se sostienen las bóvedas de crucería de tres naves. ​Entre los años 1541 y 1551 se edificó la lonja de Zaragoza del mismo tipo, pero ya con estilo renacentista. Considerando que el esquema arquitectónico era siempre el mismo, el Consejo General de la Ciudad, en 1469, insistió en la belleza del edificio que debía ser: «muy bella, magnífica y suntuosa, la cual sería honor y ornamento de esta insigne ciudad».

Para poder construir su edificación se compraron y derribaron veinticinco casas próximas al mercado. El principio oficial de las obras puede considerarse con fecha del 5 de febrero de 1483 y el 14 de marzo se pagaron los primeros jornales a Pere Comte y a Johan Yvarra: pro salarium eorum et Sue comitive. En octubre de 1483 el maestro de obra de la ciudad Biulaygua terminó sus trabajos en el terreno y desaparece de toda documentación.

La Lonja está formada por cuatro partes que son: la Torre, donde se encuentra un calabozo en el cual eran introducidos los ladrones de seda y los mercaderes y comerciantes poco honrados hasta que venían hacerse cargo de ellos las autoridades pertinentes, la Sala del Consulado del Mar, antiguamente casa de la ciudad, el Patio de los Naranjos y el Sala de Contratación o Salón Columnario. La superficie del monumento supera los 2000 metros cuadrados entre zonas edificadas y no edificadas. El edificio se adapta a un solar rectangular, el sur mira hacia la plaza del Mercado, el oeste hacia la calle de los Cordellats, el norte hacia la calle de La Lonja y la parte este hacia la calle de Pere Compte. Enfrente mismo se encuentran el Mercado Central y la iglesia de los Santos Juanes.

Vista desde la plaza del Mercado, la parte derecha del edificio corresponde a La Lonja propiamente dicha, también conocida como Sala de contratación o Salón columnario (1483-1498); a su izquierda se encuentra la Torre central (1483-1498), de tres cuerpos empleados para capilla (el piso bajo) y para prisión (los dos pisos superiores). Un poco más hacia la izquierda hay el cuerpo constituido por tres plantas del Consulado del Mar, que se añadió posteriormente (1498-1548). El Patio de los Naranjos articula las tres zonas del edificio, que ocupan más de dos mil metros cuadrados en total.

Pongo las fotos que pude sacar, ya que el acceso al interior no está adaptado para personas de movilidad reducida.